QUIÉNES
SOMOS

Mejillones Ría de Arosa está presente en el mercado nacional e internacional de mejillón cocido y ultracongelado desde los años sesenta, con una larga tradición familiar transmitiendo sus valores y su saber hacer de una generación a otra.

Desde entonces tenemos como tarea conseguir la mejor calidad en todos nuestros productos, respetando el medio ambiente y garantizando la calidad sanitaria, gracias a un riguroso control en todo el proceso de producción.

Seleccionamos día a día los mejillones procedentes exclusivamente de las Rías Gallegas, compatibilizando la aplicación tecnológica con la forma tradicional. Todo esto unido a la profesionalidad y experiencia de las personas que forman parte de nuestra empresa, nos permite conseguir la mayor calidad en nuestros productos, conservando todo el sabor, frescura y textura, dando el mejor servicio a todos nuestros clientes.

NUESTRO
PROCESO

Nuestro proceso se basa en ofrecer el trato adecuado así como buscar la mejor calidad en el producto final. Este trabajo está enfocado fundamentalmente a la cocción, el desconchado y la congelación de Mejillones únicamente gallegos, dándoles un terminado y una presentación perfectos para poder disfrutar al máximo de este apreciado molusco.

CERTIFICACIONES

Desde nuestra empresa Mejillones Ría de Arosa S.L. tenemos como principal objetivo ofrecer a nuestros clientes un producto de alta calidad.

Para ello llevamos años mejorando nuestras instalaciones y formando a nuestro personal en la mejora y optimización de nuestra materia prima, a través de un sistema de control de calidad y sistema de APPCC.

Nuestra empresa cuenta con certificado de mejillón ecológico emitido por el Consejo Regulador de Agricultura Ecológica (CRAEGA) y certificado de mejillón de Galicia con certificación de origen protegida, emitida por Bureau Veritas S.A.

Para garantizar la calidad y seguridad de nuestros productos se realiza un control exhaustivo a través de un sistema analítico completo tanto de nuestro producto, como de las aguas, superficies y atmósferas, así como un control de calidad periódico.

CULTIVO DEL MEJILLÓN

La producción de mejillón iniciada en las Rías Gallegas en el año 1946, está basada tradicionalmente en el cultivo en batea. Una batea es una trama flotante que tiene una superficie media de 500 m2, formada principalmente por una serie de flotadores que soportan unos listones de madera de eucalipto de forma rectangular.

En general, el cultivo de mejillón está estructurado en 4 etapas diferentes:

  • Obtención de la semilla
  • Colocación de la semilla en cuerdas
  • Desdoble
  • Engorde

Las cuerdas utilizadas para el cultivo suelen medir de 12 a 18 metros y llevan intercalados cada 40 cm unos palillos de madera/plástico cuya misión es distribuir el peso del mejillón a lo largo de toda la cuerda, impidiendo así que se desprenda.

Estas cuerdas con la simiente se sumergen en el mar pendiendo de la plataforma. Cuando el peso de la cuerda es aproximadamente de 100 Kg se hace un desdoble. Esta fase consiste en repartir la carga en dos o tres nuevas cuerda de unos 30 Kg. Esto implica un segundo encordado, el mejor sistema conocido que da mejor rendimiento.